Las vacaciones son un momento importante para todos. Nuestro clima, nuestra gastronomía, nuestros atractivos culturales, patrimoniales y unos enclaves naturales de excepción, convierten a España en un destino turístico de primer nivel. Sin embargo, muchos españoles se van a ver privados este año de las ansiadas vacaciones por la escalada de precios que venimos experimentando desde hace meses. En este contexto, la Educación Financiera se vuelve una gran aliada para mantener la salud financiera de los hogares afectados por estos problemas.
4 de cada 10 familias se plantean cancelar sus vacaciones o cambiar de destino
Según una encuesta de Sigma Dos, el 43% de los españoles prevé anular sus vacaciones de verano o seleccionar otro tipo de destinos más asequibles por el aumento del IPC. Y es que la guerra de Ucrania y la complicada situación económica, han disparado la inflación a niveles de dos dígitos, alterando los hábitos de consumo de muchas familias y hogares.
Las vacaciones un 40% más caras
Estamos ante uno de los veranos más caros de la historia. Irse de vacaciones hoy es un 40% más costoso que hace un año. Los billetes de avión se han disparado un 50% y los hoteles un 40%. A esto se le suma la escalada en el precio de los combustibles o el aumento incesante del precio de la energía. Con este aumento incesante del IPC, es fundamental prepararse para ahorrar en las vacaciones del verano.
Misma situación en Europa
Las familias europeas no se encuentran en una situación muy diferente respecto a las españolas. Los hogares han llegado a esta situación con una capacidad de ahorro muy mermada (el equivalente a un mes de salario medio), una cantidad totalmente insuficiente para afrontar un periodo de mayor gasto al no disponer de un colchón de ahorro amplio. En este sentido, os recordamos este artículo sobre el fondo de emergencia, qué es y cómo crearlo.
El turismo nacional, el más afectado
En esta situación, vemos una gran diferencia en la comparativa entre el turismo doméstico (el nacional) y el turismo extranjero. Mientras que se ha contrastado cierto aumento del turista internacional que llega a España, también se aprecia que los hábitos de las familias españolas, especialmente los que se refieren a los viajes en el período vacacional, se están resintiendo porque la economía de los hogares ya se encontraba en una situación muy dañada por la pandemia.
Las consecuencias de la situación
Esta realidad no se queda en el mero hecho de la renuncia a las vacaciones por parte de muchos hogares; en un país como España, en el que el turismo es el principal motor económico, se traduce en una situación complicada para muchas empresas, con la consecuencia de la pérdida de empleo, salario y riqueza que deja de crearse o se destruye.
El salvavidas del verano
Ante la crisis económica y los retos a los que se enfrentan las familias en relación a sus finanzas personales, es fundamental contar con una buena planificación financiera; un presupuesto coherente, previsor y realista, nos puede ayudar a reducir gastos, optimizar ingresos y contar con ahorro que nos permita hacer frente a posibles imprevistos o situaciones adversas como la que estamos viviendo actualmente.